AITANA Y MIKEL
Muchas cosas han pasado en mi vida desde que abandoné este lugar, la mayoría de las cosas que tenían sustancia y relevancia en tiempos previos ya no la tienen. Ahora la sustancia viene de los ojos de Mikel y su voz cuando me llama papá; ahora la relevancia está en convertirme en papá por segunda vez.
Convertirse en padre es ese concepto enciclopédico que describe responsabilidades, habilidades, lazos sanguíneos y principios que uno adquiere o requiere, en el momento que la cochinada esa marca dos rayitas. Es ese concepto, el que te hace sudar frío (independientemente de que estés felíz o no por la noticia, absolutamente todos tenemos miedo frente a ella) y cuestiona tu estilo de vida.
Ahora, convertirse en "pa-páh" no tiene nada que ver con eso, no da miedo, no tiene adornos o complejidades, es esa voz pequeña y aguda que te convierte en cómplice de sus sonrisas.
Los quiero güeros
pa-páh