LOS DÍAS CLAROS

Nos volvemos a acoplar a esta realidad que nos vuelve sonrientes y felices. Todo marcha bien, una extraña tranquilidad recorre los días y nos hace más concientes de lo que vivimos y estamos por vivir.

Funcionamos bien, hacemos que la vida fluya de forma tranquila, nos sentimos seguros, por estar juntos, nos levantamos cuando tenemos que hacerlo y lo celebramos de igual forma. La realidad nos regala días muy claros donde se puede ver toda la ciudad, desde lo lejos. Señales de que se vienen cosas buenas, cosas muy felíces y simples, como ver la ciudad con días claros o como verla sonreír a mi lado.

Sona ara: Nahun a punto de irse a dormir

VUELTA

Hoy vuelves, con un poco de cansancio, gripa y algo de tristeza. Me sabe mal que tengas que dejar eso que tanto quieres, me sabe mal escucharte un poco apagada pero...

Hoy vuelves y me haces muy felíz, hoy vuelves y regresan las noches de lunes por el super, la compra de alegrías y paletas de media tarde, los bistecates y domingos de flojera para ver la tele. Hoy vuelves y me regalas la felicidad de saberte cerca, miradas cómplices y caminatas de la mano.

Me encargaré de eso, de regresarte la sonrisa, de hacer que esta ciudad no te coma y por el contrario te acompañe, que te llene de sonrisas, que te presente sus rincones y te alegre las mañanas. Te llenaré de besos y abrazos, para que no extrañes tanto las montañas y sus vientos, el acento de vos y los shucos, a cambio te recibiré con una ciudad fría donde el cariño precisa de cobijas para decirte cuanto te quiero y no se congelen las palabras.

Sona ara: Telediario - TVE

SUEÑO

Los párpados me pesan, me pesan como cortinas mal cerradas. El trabajo y noches en vela que se ocupan en contar días y esperar a que pase el tiempo un poco más rápido, ellos son los culpables.

Cerati me canta desde Buenos Aires y con orquesta, como su misteriosa forma me lastimará, pero no lo puedo evitar.

Y al final el tiempo no pasa más rápido sólo pasa y me alivia saberlo, poco tiempo para que llegue un domingo esperado como pocos. Entonces no habrá sueño, ni habrá cortinas que cerrar, sólo recobraré sentido.

Sona ara: El Rito - Gustavo Cerati