GARRAPATEROS DEL MUNDO
de allá del sur el bicho
Es extraño como suceden las cosas, estaba yo en un Sanborns muy tranquilito a lo mio leyendo revistas, cuando me llaman a preguntarme que si quiero ir al concierto, automáticamente dije que sí, pero sin imaginar siquiera lo que iba a ser.
Llegamos, muy tranquilito todo, unas cañitas y un salon medio cuculucón que no animaba a pararse en el asiento. Pasaron los minutos y vimos llegar a una chica que se nos hizo familiar (después resultó ser una vieja conocida). Sonaron las notas de los Chunguitos y aparecieron simpáticos ellos comenzando a mover las fibras.
Los viejos sonidos pero que ahora cobraban rostro, la música, los recuerdos de buenos coleguillas, de la Clara, el Igor, la Mónica, la Anna, la Laia, el François y otros tantos que se me venian a la mente. Las palmitas salieron automáticas y estos grandes hacian lo suyo y lo disfrutaban, nosotros desde el otro lado del escenario, increiblemente cerca con cigarrito y una cañita más, no lo podíamos creer, "tu sólo quieres quererme cuando tú quieres..." que momento.
Los Delincuentes estaban frente a nosotros, sencillitos gozando el momento y al parecer un poco extrañados de estar tocando en este lado del charco, la Julieta (que ya decíá yo que se me hacía conocida) que cantó Después y luego se echó un diez con Lobo López y por último Kiko Veneno que resulto ser un maestro, todo un garrapatero con clase, y no podia fallar, "Te echo de menos" y "Mercedes Blanco", qué más se podía pedir.
Un final de buenos compadres, que invitaron al público a bailar, aunque pocos se animaron, nosotros pegados al escenario mientras sonaba aquello de "volando voy, volando vengo..." con palmitas y hasta la señorita Venegas hacía lo propio.
Momento Kodak ... el mejor concierto del año.