SIN TIEMPO DE DECIR...

Los últimos días llenos de actividades, me he tomado un distanciamiento del mundo virtual y ello irrumpido por eventos, enfermedades y viajes.


1. Los Premios MTVLA

Por un día me convierto en el Dios de las acreditaciones, en el Juan Camanei de los accesos y en ese momento personaje importante "del medio" no por que alguién me reconozca sino por la capacidad de moverme a mis anchas en un lugar donde todo es restringido. Un sencillo gafete azul, diversas estampas con el logo SHOW y la frase "MTV Research" fue lo que me permitió estar a menos de diez centímetros del señor Robert Smith (lo más rescatable de la noche).

Sin embargo fuera de poder ver varios pares de piernas deslumbrantes, en su mayoría de producción sudamericana, el evento no fue lo máximo, toparme con conocidos que ahora son "del medio" y saludarlos, soportar a la gente de prensa y el calor de sus reflectores, ingresar a la fiesta VIP a falta de mejor resguardo para la lluvia y una gripa que ya en ese momento era marca ACME terminaron la noche y la odisea.

2. Los viajes

Maleta, cigarros y apuntes, esta vez tocaba regresar a Chiapas, después de cuatro años el lugar sigue teniendo magia, costó en un principio aclarar los panoramas, un calor exorbitante me recibió en Tuxtla Gutierrez y la jornada laboral sin penas ni glorias. Sin embargo fue la vuelta a San Cristobal lo que me lleno los ojos de lágrimas y de nostalgía. El lugar sigue teniendo los sueños de ambar intactos, recorrer sus calles me hizo desplazarme a ese contexto apartado e idealista del que mi laburo diario me ha apartado, pero que sigue en mi, y en el recuerdo de aquellos a quienes quiero y espero sin remedio.

Guadalajara segunda parada, parada express y contagiosa, no tuvo novedades más allá del placer de recorrer la calle de Vallarta y saber que en cualquier momento puedo mudar los pies a la perla de occidente.

3. Las Vuletas

Los regresos, más imprecisos pero certeros, la novedad de regresar a "mi" casa, pero la capacidad de hacerlo con una sonrisa. Volver es siempre un lugar cómodo y a veces saludable, esta vez me recibió el invierno temprano, pero de igual forma me gusta oler el viento frio, como en Paris como en Barcelona.

Sona ara: Dance with me - Nouvelle Vague

Para Ceci... que se despide lento

ARAÑAS Y LUCES VERDES

Y si iniciamos con un guión pre establecido no sabríamos por dónde comenzar, por un sábado de luces verdes mientras las notas de Pink Floyd atravesaban la cosecha de sonrisas y risas de una madrugada alegre. Si por la superviviencia (aun dudosa) a un ataque histérico de arañas, moscos o que se yo, que se han consumido mi cuerpo de forma espantosa, y que ahora combato con alcohol y uñas en espera de que un alien salga en cualquier momento.

O quizá deberíamos de comenzar por el disco tres veces repetido, de repertorio curioso, con mensajes por dentro de la serigrafía de grecas que me ponen de buenas (nuevamente los chicos de Satélite salen con una joya más). Quizá por las alegrías y decepciones deportivas, que se alimentarán este domingo cuando se vistan de gloria con tonos guinda y blanco o por el contrario se empañen con el azul y oro (vamos muchachos haganme el día).

Quizá no sabremos como comenzar pero eso es lo de menos... la vida me está tratando bien.

Sona ara: Quiero ver - Cafe Tacvba
A Yurem... por hacer de un consumo dominguero y necesario de TV basura, más ameno y felíz

AGOTAMIENTOS

Ya me cansé de la lejanía con mis personas cercanas

Me cansé de tratar de acercarme con abrazos... e irrumpir sus bebidas

Me cansé de los silencios forzados

Me cansé de los ratos incómodos, de no poder aceptar que él no está

Me cansé de no poder platicar de ello, de esperar respuestas y tiempos ajenos

Me cansé de ser satélites para no incomodar sus tristezas... porque los demás también estamos tristes

Ya me cansé de no hablar

Ya me cansé de que él no esté presente... pero eso es lo único que no puedo solucionar

De todo lo demás ya me cansé

Sona ara: Don't save us from the flames - M83

... PAUSAS ...

Cada vez se hacen más comunes los espacios, una de las problemáticas de acostumbrarse a la convivencia con uno mismo, es precisamente que la calidéz y emoción de cohabitar un espacio nuevo se pierde.

Ahora todo ha transcurrido de forma más calmada, las nostalgias fueron curadas en un domingo entre cortinas y luces bajas. Recorro un cuarto de ciudad para volver a mi "casa", sí aquella del sur que siempre me recibe como un escenario común y acogedor. En efecto llegar a Coapa es llegar a un territorio conocido, un espacio donde los rincones siguen teniendo historias compartidas, donde puedes caminar descalzo a oscuras y sin tropiezos; y donde finalmente las calles se vuelven lugares comunes que te recuerdan que ese es tu territorio y las cosas son . Me gusta el olor de mi "casa" donde se impregna la comida y algo más, me gusta dormirme un rato en ahí, porque mi cuarto sigue teniendo los olores comunes, aunque la geografía cambie un poco.

Ahora para curar nostalgias, nuevamente me toca hacer maletas, nuevamente avión, cigarros y maleta... propera parada... Guadalajara y Veracruz.

Sona ara: Comfortably Numb - Pink Floyd

NOSTALGIAS Y TRISTEZAS INNEVITABLES

Pasado mañana se cumplen tres semanas... ventiun días comunes y corrientes que pasan en la vida de cualquier persona entre fiestas, laburo y demás; sin embargo días que para mí han pasado lentos, a veces demasiado, a veces de forma extraña mientras me acostumbro más a mi cuarto y los vacíos.

Los primeros días avanzaron de buena manera, días en que la rutina se hacía mi cómplice, en que la innexperiencia en un nuevo espacio era relevante y motivante para descubrir los pequeños placeres de volver a vivir por mi cuenta. Pero los últimos han estado jodidos, la nostalgia por un inicio de año caluroso en las plazas, por los peceros de manoseo jugueton o por películas vespertinas de complicidad extraña. Se han vuelto tristes, porque es difícil dejar de ser, cuando los sentimientos los traes todos revueltos y el interlocutor no cohabita con uno.

Por qué no poder regresar a una tarde en el metro... a las sonrisas complices, a una noche perdido, a un mensaje que no esperas pero que parpadea en el teléfono, la nostalgia y la tristeza se vuelve innevitable cuando pasa el tiempo. Las esperas son jodidas y sólo se tiene el miedo y la esperanza de que los días se vuelvan rápidos y se vuelvan hacía ti.

¿Cuando el mundo te grita que las cosas se terminan... por qué hacerle caso?

Sona ara: Loyalty Song - Babyshambles